Colección: CBT

 

BON4 es mundialmente conocido por sus productos de castidad masculina de alta calidad y nos gusta mantener esa reputación.
De todos modos, por petición popular hemos decidido añadir algunos productos BDSM escrotales a nuestro sitio web.

La castidad como sumisión

Somos todos hombres, el sexo privilegiado en nuestra sociedad. Todos los hombres, hetero, gay, bi o transgénero, poseen la llave para mayor respeto, mejores salarios y deferencia de los demás: un pene.

Pero sabemos que no todo es así. Tendemos a pensar con nuestra “cabeza inferior”. Muchos de nosotros dejamos que nuestro impulso sexual supere nuestro juicio. Si estás en una relación amorosa, quizá desees darle a tu pareja una prueba tangible de tu devoción y ceder voluntariamente a la castidad.

Por estas u otras razones, que un hombre privilegiado entregue voluntariamente el control de su pene, y por ende de toda su sexualidad, a su Keyholder es un acto conmovedor y cargado de emoción.

No cabe duda de tu devoción después de ofrecer a tu amante las llaves de tu sexualidad. El acto de sumisión cimenta los roles en la relación y refuerza la fortaleza de vuestras personalidades.

Los hombres sumisos y sus parejas dominantes a menudo encuentran muy satisfactorio estar “cerrados”, con sus roles claramente definidos. Seguramente tú y tu pareja también lo disfrutaréis. Sométete a tu Keyholder para experimentar plenamente la sumisión.

Por favor, enciérrame — reclutando a un Keyholder

La ficción de castidad masculina suele seguir un patrón típico: una pareja indignada o enfadada (generalmente la esposa) encierra a su amante en castidad bajo amenazas. Estas fantasías pueden gustar, pero rara vez reflejan la realidad.

Más a menudo, el hombre pide a su pareja que lo restrinja, que sea su Keyholder. ¿Por qué sucede esto?

Cualquier hombre entiende mejor que nadie cómo su vigor sexual puede meterlo en serios problemas. Un hombre comprometido en una relación pero con tendencia a la infidelidad puede pedir a su pareja que lo controle. Otro puede querer retirarse sexualmente por un tiempo. Sea cual sea la razón, pedir a tu pareja que cierre tu pene nunca es fácil.

Algunos hombres esperan un acontecimiento externo para abrir la conversación, una noticia o un incidente entre amigos. Otros expresan su deseo sin preparación. Estos enfoques rara vez funcionan.

En su lugar, una vez que reconozcas tu necesidad de castidad masculina, planifica cuidadosamente cómo plantear el tema. Tú sabrás mejor si presentarlo como un regalo que demuestra tu devoción, una solución a un problema que ambos reconocéis, o incluso como un castigo por ciertos comportamientos. Concéntrate en los sentimientos de tu pareja, no en tus deseos.

Definir la razón de la castidad puede no ser suficiente. El momento y tu enfoque específico pueden ser críticos. Aquí tienes algunas sugerencias generales. Adáptalas a tu situación.

Si hay un problema concreto, como la eyaculación precoz, no lo menciones justo después de otra experiencia sexual insatisfactoria. Espera hasta que ambos estéis relajados y hayas realizado algún gesto que tu pareja disfrute. Reconoce cómo tu comportamiento puede haber decepcionado a tu pareja y pregunta cómo se siente. Solo entonces, y brevemente, menciona lo mal que te sientes. Si recibes una respuesta positiva, pregunta si estarían interesados en una posible solución. Si es así, introduce la castidad.

Si no tienes nada de qué disculparte, te recomendamos abrir la conversación en un momento en que tu pareja esté receptiva. Describe tus sentimientos de devoción o tus deseos de autocontrol. Lo importante es empezar con tus emociones genuinas y explicar cómo crees que el regalo de tu sexualidad, expresado en un dispositivo de castidad y juegos de castidad, podría mejorar vuestra relación. Sé totalmente honesto. No es el momento para agendas ocultas.

Lo más probable es que tu amante y futuro Keyholder sientan curiosidad y quieran explorar más. Anímales a reflexionar sobre sus reacciones con el tiempo y estate dispuesto a responder cualquier pregunta.

Los enfoques respetuosos y centrados en la pareja, como estos, tienen más posibilidades de recibir una respuesta positiva.

 

Entrenamiento para la castidad a largo plazo

Cuando tu Keyholder decida que debes permanecer encerrado más de unos pocos días, agradéceselo y muestra tu aceptación de su juicio.

En esos casos, asegúrate de que tu cuerpo y la combinación con la jaula estén preparados para un uso prolongado.

 

Cómo introducir mi pene en una jaula…

He desarrollado una técnica que funciona y he imaginado otra que aún no he probado.
Mi pene flácido tiene un diámetro de 12,7 mm. Intenté varias veces encajarlo en una jaula, pero sufrí punzadas de los dos pasadores que alinean la jaula con el CBR. La piel suelta se acumulaba en la entrada y los pasadores pinchaban mi carne sensible.
Usé aceite mineral para intentar deslizar mejor las cosas sin mucho éxito. Pensando que tal vez fuera mejor tirar que empujar, ideé la siguiente solución.

1. Desenrolla completamente un condón. Muy largo, ¿verdad? Todos quisieran tener algo para llenar el cilindro, pero nadie lo tiene.
2. Coloca el condón tan abajo en tu pene como sea posible. No hace falta que esté erecto; los condones se estiran bastante.
3. Empuja la punta del condón a través del orificio de la uretra de tu jaula. Puede ayudarte usar la goma de un lápiz. (Los condones con depósito de semen funcionan mejor.)
4. Tira lentamente del condón a través del orificio de la uretra. Esto alarga y estrecha tu pene. Cuando tu pene esté lo más dentro posible, el condón se deslizará solo.
5. Inserta el pasador en la jaula, desliza el separador y atraviesa cuidadosamente los agujeros del CBR con los pasadores. Pon el grillete en el pasador y gíralo hasta el final. Ahora bloquea la jaula. ¿No se siente sólido y satisfactorio?
6. Muestra a tu Keyholder la profundidad de tu sumisión siendo completamente obediente.

La segunda técnica, que aún no he probado, ofrece a tu Keyholder una oportunidad de CBT.

1. Introduce todo lo que puedas de tu pene en la jaula. Un lápiz con goma puede ayudar a empujar.
2. Tu Keyholder introduce unas pinzas por un orificio lateral, agarra un pliegue de piel y lo extrae a través de la jaula.
3. Repite en cada agujero para extraer más piel suelta. Puede que tengas que hacerlo varias veces. ¡Disfrútalo!
4. ¿Se ve tierno o ridículo, apretado como está? Si lo pruebas con éxito, tómate fotos o graba un vídeo y cuéntanos.

Sheathskin: palabra compuesta para la piel suelta y arrugada en la superficie de un pene flácido. Esta piel resbaladiza es muy placentera en cualquier orificio cálido.

BON4 para quienes se toman en serio la castidad masculina